Ha llovido mucho desde que pisé por última vez el edificio de Educación Primaria e Infantil de mi colegio, IPSI. Fue mi escuela durante 16 años, pero hacía ya por lo menos dos que no paseaba entre sus paredes como antaño. Y tras todo este tiempo vuelvo para tratar de entender mejor qué le está pasando a la educación. Oriol Blancher, director general del centro desde el 2006, gratamente ha aceptado en ayudarme y darme todos los detalles que le pida acerca de IPSI, la LOMCE (Ley Orgánica para la Mejora de Calidad Educativa) y cómo esta reforma afecta tanto al centro como a la educación. Tengo ganas de conversar con él, es un hombre respetado y admirado. Lo sabía, y lo supe aún más tras recibirme cordialmente en la sala de espera para dirigirnos a su despacho. Cruzamos el patio durante el descanso de los niños de 4º de primaria. ¡Con qué admiración le miraban! En esa conversación entre director y pequeños alumnos vi en sus ojos la implicación que tiene en la enseñanza y en buscar una sociedad mejor.
Oriol Blancher en una de las mesas de su despacho. Autoría propia
Es licenciado en filosofía y ciencias de la educación, maestro y profesor, con la homologación necesaria para ejercitar la docencia en cualquiera de las etapas educativas. Además de ser el director del centro, Blancher está muy integrado en el mundo de la Educación. Es Presidente de la AEC (Agrupació Escolar Catalana), una patronal que engloba un centenar de colegios privados o concertados del Barcelonès. También es miembro de la Coordinadora Catalana de Fundaciones de Educación, y anteriormente trabajó para la Fundación Jaume Bofill y formó parte del Consejo Municipal del Distrito, y ha firmado libros de texto de metodología matemática, así como colaborador de volúmenes de tecnología y filosofía.
Blancher, de puertas para dentro
Llegamos a su despacho, muy espacioso para una sola persona, con un gran ventanal que ilumina por completo su interior. Me ofrece un vaso de agua, que acepto, mientras tomamos asiento y empezamos la charla. Para romper el hielo le muestro mi curiosidad sobre cómo surgió la opción de dirigir la escuela. “IPSI vino a buscarme”. En el 2006 Blancher era director de los Escolapis de Balmes. Fue ese año cuando IPSI llamó a sus puertas para que accediera a dirigir el centro. “Estaba a gusto donde estaba, no buscaba otro trabajo. Pero el proyecto educativo que IPSI me pareció muy atractivo y ambicioso. Y solo faltó conversar con Antoni Amorós, fundador y antiguo director del colegio para decantarme definitivamente por el sí. Es un colegio innovador, con ideas educativas excelentes y unos resultados académicos que lo avala”. Me respondió contento con nueve años de perspectiva. Y notaba en sus palabras que, como él, el centro también está muy contento con su incorporación. Aunque se niega valorar si IPSI ha mejorado desde su dirección, gracias a sus planes la escuela pasó de tener cerca de 130 alumnos en Bachiller a 180 aproximadamente, con una media en selectividad superior al 7,4 en los últimos cursos. Pero no solo eso, el pedagogo cree moderadamente que ha mejorado la “atención a la diversidad, la metodología de trabajo y la rentabilidad del centro”, aunque afirma rotundamente que “más que mejorarlo, trato de no estropearlo; esta es mi mentalidad”.
“Hacer un tercer de Bachiller sería ventajoso”
El hombre que cambiaría “muchas” cosas del modelo actual a la pregunta de qué modificaría del sistema educativo si pudiera, destaca los puntos más oscuros. Lo son la formación de buenos profesores y docentes, ya que según el “las facultades de magisterio actualmente son malas, no les enseñan lo que tendrían que aprender realmente”, así como plantearse añadir un tercer año de Bachiller, lo que para él sería muy productivo para el estudiante, o mantener la dualidad de escuelas públicas y centros privados o concertados. “El contexto de una doble red de centros produce una libertad a la hora de elegir”, asegura.
«La LOMCE es una ley de reforma muy mal construida, basada en destruir y oponerse a la anterior”
Pero la educación española pasa por una etapa más polémica que el entorno de IPSI que Blancher dibuja al hablar. ¿Cómo ha afectado la LOMCE al colegio? – le pregunto para adentrarnos en la situación del centro – .”La verdad es que a nosotros la LOMCE nos ha influido muy poco”. El director explica a la vez que tomo agua del vaso que al tratarse de una escuela catalana, la ley a la que ésta se debe es principalmente la LEC (Llei educativa catalana), una ley de consenso aprobada en el Parlamento de Cataluña en el 2009 con un 80% de las fuerzas políticas de la cámara a favor. “Imagínate cuál era la fuerza que se oponía”, ironizó Blancher. Se trata de la primera ley de consenso en educación que se aplica no solo en Cataluña, sino en todo el estado. Pese a eso, reconoce que la Ley Wert ha implicado leves modificaciones en el currículum de algunas asignaturas de Bachiller. “Lo que no podemos permitir es que nuestros alumnos durante el curso se examinen de temario diferente al de la selectividad”, de modo que IPSI solo se ha visto en ese sentido.
Pero el presidente de la AEC se muestra completamente reacio a las ideas de la reforma. Según él, el Ministerio la fomentó básicamente en revertir por completo lo que la anterior Ley defendía. “En vez de plantearse qué modelo implantar partiendo de cero, quisieron substituirlo por uno de artículo único que corrige y rebate lo que ya había”.
“No es solo por la reforma, sino por la oportunidad que se pierde con ella”
Oriol Blancher tras hablar de la reforma con un alumno reformado l Autoría propia
Está claro que Blancher no es partidario de la reforma que propuso Wert. “Por ejemplo, es absurdo que se hable de renovación metodológica y trabajo cooperativo para resumirlo todo a un examen final tipo test de 350 preguntas”. Al filósofo le basta con leer ambos preámbulos, el de la anterior ley de educación y la LOMCE, para darse cuenta de las incoherencias que plantea el modelo actual. Según él, el de la legislatura del PSOE busca “la igualdad, la equidad y la felicidad a través del conocimiento y el trabajo”, mientras que este pretende la “competencia, competitividad y las ganas de aspirar a más porque sí”.
Además de reducir la autonomía de las escuelas. “La LOMCE hace menguar la autonomía de las escuelas indiscutiblemente”, afirma el director. Eso resulta negativo para las escuelas y para la estructura educativa, porque su funcionamiento tiene que ser independiente pese formar parte de un contexto global. Pero, para él, lo más “dramático” de la situación es la “pérdida de oportunidad de hacer una buena ley de reforma” que mire por el estudiante y no lo que esto genera. No sé si es por su explicación o por la sed, que empiezo a ver el vaso de agua medio lleno.
Para el presidente de la AEC es “un drama” que el Ministerio quiera apartar de los planos de estudios asignaturas como filosofía, música o artes plásticas. Se trata de materias con dimensiones artísticas básicas para la formación del ser humano. “No entender eso es no entender cómo funciona el cerebro”. Blancher opina que “hay que construir estructuras en las mentes de la gente para alimentar el pensamiento”. Hace referencia no solo a la “creatividad”, sino a la “ordenación espacial y la capacidad tanto de análisis como de síntesis, algo que no puede dejar de cultivarse para no perder unos valores éticos y estéticos”. Lo mismo pasa con su apreciada filosofía. Considera que su problema principal es el enfoque que se le da, más allá de los cambios que pueda sufrir. Según el pedagogo, que la asignatura se vea relegada a un temario de contenido lingüístico es un error; “es una materia con unos valores y tan ligada tanto a las ciencias como al pensamiento, en definitiva, al ser humano, que resulta incomprensible que unos dirigentes actúen así”.
El vaso que me ofreció a inicios de la charla se está acabando. Cómo ha estado toda la conversación mostrando quejas y argumentos contra la LOMCE, le pregunto acerca de unas declaraciones que el polémico ministro realizó unos meses atrás, en las que defendía que su aplicación supone un punto de partida para solucionar los problemas del sistema. – ¡No! – corrigió rápidamente. “Será para corregir su sistema, el que ellos se habrán creado y el que consideran mundialmente válido”, supone, mientras tomo el último sorbo de agua.
Enlazes para profundizar:
Nil Sellabona Serrat
alumnosreformados.wordpress.com 